Marcos Lima, ex CEO del gigante minero chileno Codelco, señaló que si Estados Unidos impone aranceles a las importaciones de cobre, los consumidores enfrentarán precios más altos porque la producción nacional no puede llenar rápidamente el vacío de suministro. Como socio fundador de los consultorios de San Diego CIS, Lima enfatizó que tales medidas proteccionistas no son beneficiosas para los Estados Unidos. El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, firmó una orden ejecutiva el martes para lanzar una revisión del Artículo 232 para evaluar el impacto potencial de las importaciones de cobre en la seguridad nacional. Lima dijo que el aumento de los precios del cobre en los Estados Unidos será el único resultado porque la capacidad de producción no se puede mejorar a corto plazo.
El asesor comercial de la Casa Blanca, Peter Navarro, dijo que los competidores globales debilitaron a la industria del cobre de los Estados Unidos a través de subsidios y exceso de capacidad, y abogó por que el cobre volviera a la producción local. En los últimos años, la producción de cobre estadounidense ha continuado disminuyendo, un 3% en 2024 en comparación con 2023, y el cuello de botella de licencia restringe aún más el desarrollo del proyecto. A pesar de las reservas suficientes, Estados Unidos se queda atrás en capacidades de fundición y refinación. Los fabricantes extranjeros como China Jiangxi Copper Industry dominan el mercado global de fundición, agravando la dependencia de los Estados Unidos de las importaciones. Los datos muestran que la proporción de importaciones de cobre estadounidense ha aumentado de casi cero en 1991 a 45% en 2024, y la vulnerabilidad de la cadena de suministro se está volviendo cada vez más prominente.
Las fluctuaciones de precios del cobre tienen preocupaciones agravadas del mercado. Los futuros de cobre aumentaron a $ 4.68 por libra esta semana y volvieron a $ 4.52 el viernes. Los comerciantes como Glencore y Tok están acelerando su envío de cobre a los Estados Unidos, aprovechando la ventana de las ganancias previas a la tarifa, con la prima de los precios de cobre estadounidenses que alcanzan los $ 1,300 por tonelada. Lima advirtió que la medida no solo aumenta los costos, sino que también podría desencadenar una guerra comercial y amenazar el crecimiento económico global. El precedente previo de Trump de aranceles sobre el acero y el aluminio ha profundizado las preocupaciones del mercado sobre las consecuencias de la investigación actual.