Argentina se reanuda a aumentar los aranceles sobre las exportaciones de soja y maíz

El Ministerio de Asuntos Económicos de Argentina aprobó un decreto para restaurar los aranceles de exportación sobre la soja y el maíz hasta los niveles de enero desde el 1 de julio, mientras que los aranceles de exportación sobre cebada y trigo permanecen bajas hasta el próximo año.

Según el decreto emitido el viernes, los aranceles de exportación sobre trigo y cebada se mantendrán en un 9,5% hasta el 31 de marzo de 2026. Los aranceles de soja se elevaron del 26% al 33%, los aranceles de maíz y sorgo del 9.5% al ​​12%, los aranceles de semillas de flores de la sol de sol se produjeron de 5,5% a 7%, y los aranceles de la harina de la harina del ala de los asades se elevaron el 5,5%.
El gobierno argentino inicialmente redujo los aranceles de exportación para algunos productos agrícolas en enero. La reducción de impuestos se planeó originalmente para durar hasta junio y luego se extendió a julio, involucrando soja, maíz, girasoles, sorgo y sus subproductos. En mayo, el gobierno anunció la extensión de las reducciones de tarifas de exportación temporales para el trigo y la cebada (actualmente se sembraron y se espera que se cosechen a finales de año) hasta 2026. Además, los aranceles de exportación sobre una gran cantidad de productos agrícolas de Argentina (llamados productos regionales) han sido canceladas permanentemente, incluido azúcar, algodón, vino, tobacco, productos forestales y Rice.
El gobierno dijo que la política de ajuste arancelario tiene como objetivo mejorar la rentabilidad de los agricultores, fomentar las exportaciones de alimentos y aumentar el dólar estadounidense que fluye hacia las reservas del banco central. El ministro de economía, Louis Caputo, anunció en mayo que el recorte temporal de los aranceles de exportación de trigo y cebada se llevaba a cabo en el momento en que la siembra de estos dos tipos de cultivos estaba en pleno apogeo.
Sin embargo, este movimiento rompió la esperanza de que algunos productores esperaran que el gobierno cambie de opinión en el último minuto, causando insatisfacción entre muchas partes en el sector agrícola. Nicholas Pino, presidente de la Asociación Rural Argentina (SRA), dijo que extender los recortes de producción no es una solución y enfatizó que los aranceles de exportación deben eliminarse por completo.
Coninagro, quien representa a las cooperativas de los agricultores en todo el país, dijo que el aumento renovado de los aranceles de soja y maíz causaría gran preocupación y desigualdad en todas las áreas rurales, especialmente porque la medida tocó el vínculo de producción, y al 30 de junio, muchos de ellos aún no se completaron. En su comunicado, le pidieron al gobierno que desarrollara reglas claras y duraderas para lograr la previsibilidad requerida por los productores.