El presidente de los Estados Unidos, Trump anunció recientemente que aboliría el acuerdo de extracción de petróleo firmado por los Estados Unidos y Venezuela a partir del 1 de marzo. Trump dijo en su plataforma social Verdad Social que Venezuela no cumplió los términos del acuerdo y, por lo tanto, decidió revocar concesiones en el acuerdo de extracción de petróleo alcanzado por la administración Biden y la administración de Maduro el 26 de noviembre de 2022.
Anteriormente, el Departamento del Tesoro de EE. UU. Había aliviado las sanciones a Venezuela, permitiendo que Chevron y sus subsidiarias exploten el petróleo venezolano y lo exportara a los Estados Unidos. Según la licencia emitida por el Departamento del Tesoro de EE. UU., La extracción de petróleo y las exportaciones y las ventas relacionadas deben ser responsabilidad de Chevron. Trump señaló que la decisión de abolir el acuerdo no solo se basa en el incumplimiento de Venezuela para cumplir con las condiciones para las transacciones de extracción de petróleo, sino también porque no cumplió con su obligación de recuperar a los inmigrantes enviados a los Estados Unidos por Caracas.
Esta decisión marca un cambio importante en la política de los Estados Unidos hacia Venezuela y puede tener un impacto de gran alcance en la cooperación del desarrollo del petróleo y las situaciones regionales entre los dos países. La derogación del acuerdo de extracción de petróleo exacerbará aún más las presiones económicas en Venezuela y traerá incertidumbre a los mercados energéticos mundiales.